Emergencias: Qué es una emergencia

Primeros auxilios

Consejos para primeros auxilios en emergencias y accidentes

Cuando se trata de tu salud o la salud de alguien de tu familia, suele ser evidente si la persona está gravemente enferma y necesita recibir atención de emergencia de forma inmediata.

Una emergencia es una situación de amenaza crítica a la vida y es importante saber distinguirla como tal para no alarmarse innecesariamente o no actuar con la suficiente diligencia en caso necesario.

Para ayudarte a decidir lo que es una situación crítica, para saber si se trata o no de una emergencia real, hemos recopilado aquí algunos ejemplos.

Una situación es crítica sí:

  • Hay pérdida de conocimiento.
  • Sospechas que puede haber un accidente cerebrovascular.
  • Una herida está provocando una gran pérdida de sangre.
  • Sospechas que pueda haber huesos rotos.
  • Hay una herida profunda, por ejemplo una herida de arma blanca.
  • Sospechas que pueda haber un ataque al corazón.
  • Existe dificultad para respirar o atragantamiento.
  • Hay quemaduras graves.
  • Se produce una reacción alérgica grave.

Hay algunas cosas que debes recordar en cualquier emergencia. Estos consejos para emergencias, te ayudarán a hacer frente a una situación de emergencia de forma rápida y eficiente.

  • Mantén la calma y pide ayuda. Puede que tengas que pedir a alguien que llame a una ambulancia. Asegúrate de la ambulancia sabe a dónde tiene que ir e intenta dar todos los detalles que puedas sobre la persona que está herida o enferma.
  • No te pongas en peligro. Por ejemplo, si alguien se ha electrocutado, asegúrate de apagar la fuente de alimentación antes de tocarle.
  • Haz todo lo posible para ayudar a la persona.
  • No le des a la persona nada de comer, beber ni fumar.
  • No pongas nada en la boca.
  • Sigue las instrucciones que te puedan dar desde el servicio de ambulancias.

La manera de ayudar a una persona muy a menudo depende de lo que le está pasando. A veces, la forma más rápida de ayudar es llevar a la persona al servicio de urgencias más cercano. Esto variará de una zona a otra ya que depende lo cerca que estés del hospital.

Sin embargo, incluso en una zona donde el hospital está bastante cerca, debes llamar a una ambulancia y no mover al paciente si:

  • Piensas que podría haberse dañado a la espalda o el cuello, o tiene alguna otra lesión que puede empeorar al moverlo.
  • La persona está en estado de shock y necesita atención constante.
  • La persona tiene dolor de pecho o dificultad para respirar.

La posición de recuperación

Si el paciente está inconsciente, hay que colocarlo de forma que pueda respirar con facilidad e impide que se asfixie en caso de vomitar. Pero antes, debes considerar cuidadosamente si hay alguna posibilidad de que la víctima ha lastimado la espalda o el cuello, o tiene una lesión que podría agravarse si se mueve. Ponerlo en posición de recuperación en este caso podría tener consecuencias graves. Si tienes alguna duda, y la víctima no está en peligro si se queda en su posición original, no lo muevas. Espera a que lleguen los paramédicos.

Cómo poner a alguien en posición de recuperación

Una vez que hayas comprobado que respira normalmente, colócalo de lado, con un cojín en la espalda, mueve sus rodilla hacia adelante y coloca su cabeza hacia abajo para permitir el vómito salga de forma que pueda respirar si vomita.

Recuerda que, cuando muevas al paciente hacia un lado, debes asegurarte de que su cuello y la espalda bien apoyados.

Algunos mitos acerca del servicio de urgencias

El servicio de urgencias es una alternativa a tu médico de cabecera.

FALSO: No es apropiado para ir a Urgencias como una alternativa a tu médico de cabecera.

Llamar a una ambulancia hace que te atiendan antes en urgencias.

FALSO: Los pacientes se van atendiendo según su grado de importancia, no según su orden de llegada.

Todas las lesiones necesitan radiografías.

FALSO: El médico o la enfermera podrá examinar al paciente y determinar si es o no necesaria una radiografía. En muchos casos, hacer una radiografía no es necesario.

Los médicos de urgencias son más expertos en el tratamiento de los problemas médicos que tu médico de cabecera.

FALSO: Tu médico de cabecera es un experto en medicina general. Los médicos de urgencias son especialistas en accidentes y emergencias.

Tomar un calmante para el dolor antes de ser visto por un médico, podría enmascarar los síntomas de la lesión.

FALSO: Una de las primeras cosas que se hacen a menudo por los médicos es dar un analgésico simple como el paracetamol. Es bastante seguro tomar esto antes de llegar a un médico. Tomando el analgésico para el tratamiento de lesiones de menor importancia es la mejor manera de sentirte mejor rápidamente y es un tratamiento eficaz. Siempre sigue las instrucciones en el envase o prospecto.

Algunos mitos acerca del médico de cabecera

El médico te tiene que visitar en tu casa.

FALSO: Los médicos a decidir si o no a visitar a un paciente en casa, basándose en tus necesidades médicas. Sólo los pacientes que tienen impedimentos graves para llegar a la consulta, son visitados en sus casas.

El médico te atiende más rápidamente si pides una visita a domicilio.

FALSO: Durante las horas de la consulta, la mayoría de los médicos visitan a los pacientes a última hora del día. Puede que te atiendan antes si vas a las horas de consulta normal. Si puedes ir a la consulta, esto hará que el médico pueda ver más pacientes en lugar de pasar el tiempo viajando y teniendo que retrasar su consulta.

Todas las infecciones necesitan antibióticos.

FALSO: Los antibióticos no tienen ningún efecto en la mayoría de las infecciones (como los resfriados, la gripe y el dolor de garganta), porque son infecciones causadas por virus. Tomar antibióticos también puede hacer que las bacterias se hagan inmunes y no pueden ser destruidas por los antibióticos, lo cual es peligroso para toda la población. Los médicos recomiendan que visites a tu farmacéutico para que te aconseje sobre dolencias menores.

Artículos relacionados con Emergencias: Qué es una emergencia